En entrevista, el fotoperiodista noruego Jonas Bendiksen cuenta la verdadera historia detrás del proyecto, con el que busca hacer consciencia sobre el peligro de las fake news.
El Universal
CIUDAD DE MÉXICO
La publicación de información falsa costaría la credibilidad y reputación de cualquier reportero. Para el fotoperiodista noruego Jonas Bendiksen (Tønsberg, 1977) fue más bien un riesgo calculado.
El expresidente de la agencia de fotoperiodismo Magnum, miembro de la misma y ganador de premios internacionales, hizo un experimento arriesgado: un fotorreportaje falso. Así surgió el libro "Book of Veles", que cuenta cómo en Macedonia del Norte (país en el sudeste de Europa), un grupo de jóvenes se dedica a crear noticias falsas. Si bien es una historia real, para el libro Bendiksen creó las imágenes y el texto con Inteligencia Artificial (IA). Ganó el World Press Photo 2022 a nivel Europa en categoría Formato libre.
En entrevista, el fotoperiodista cuenta la verdadera historia detrás del proyecto, con el que busca hacer consciencia sobre el peligro de las fake news.
¿Qué es real y qué no en "The Book of Veles"?
No aclaro esto porque se trata de una "caza de tesoro" en la que las personas deben identificar qué es falso. Trato de replicar la dinámica de las teorías de conspiración y las fake news. Las más efectivas son aquellas que tienen un poco de verdad. Lo que puedo decir es que todo lo que ves ha sido editado de una u otra forma.
¿Qué te llevó a trabajar este proyecto?
Estaba muy preocupado por la victoria de Donald Trump. De esas elecciones surgió un nuevo vocabulario, de repente la gente hablaba de "hechos alternativos", en vez de sólo hechos. Si no estabas de acuerdo, la gente empezaba a tachar tus argumentos de fake news. Leí mucho sobre el tema, de cómo el algoritmo propició este resultado y descubrí la ciudad de Veles. Ahí, un grupo de jóvenes macedonios, sin quererlo, tuvieron un impacto en las elecciones por fabricar fake news; y me pregunté qué tan difícil sería hacer imágenes falsas. Resultó que realmente es muy fácil.
¿Este experimentó cambió tu forma de ver las noticias?
Cambió mi forma de ver cualquier información en Internet. Me hizo escéptico y más cuidadoso sobre lo que comparto en redes sociales. Lo que ha sido increíble ver es que pensé que The Book of Veles sería una mirada al futuro sobre cómo los medios de comunicación serán, pero después me di cuenta que era una visión del presente. Esta tecnología evoluciona más rápido de lo que creemos.
¿Pensaste que propiciarías la desconfianza en los medios con este experimento?
Sí lo pensé, pero el experimento fue muy cuidadoso. Antes de que el libro saliera lo vendí a través de mi sitio web y mis redes sociales. Tenía oportunidad de controlar las reacciones, por eso no ofrecí mi proyecto a la agencia Magnum ni a revistas para que fuera publicado. Fue cuando revelé la verdad, que se empezó a publicar en medios, pero hablando sobre el experimento.
Fue concebido como una especie de vacuna, como inyectarnos con el virus de las fake news, esperando que nos fortalezca. Soy de la firme creencia que todos en el planeta serán afectados de alguna forma por las noticias falsas, las imágenes sintéticas y los textos hechos por IA, aún sin la existencia de mi The Book of Veles. Hacer este libro fue muy arriesgado, pudo haber afectado la legitimidad de mis acciones. Honestamente, cuando lo inicié, no sabía si iba a terminar con mi carrera.
¿Cuánto tiempo llevó hacer las imágenes falsas y cuál fue el proceso?
Fui dos veces a Veles, tomé muchas fotografías de locaciones vacías. En casa convertí esos paisajes en modelos tridimensionales, inserté avatares en las fotografías, no sólo personas, sino también animales y objetos, como automóviles, todo generado con la computadora. Es casi como tecnología de videojuego y del cine. Así que creé un reportaje falso sobre esta comunidad que se dedica a fabricar fake news.
Fue mi proyecto pandémico. No sé bien cuánto tiempo me llevó, pero aprender a usar la Inteligencia Artificial me llevó básicamente tres días y lo aprendí viendo tutoriales de YouTube. Los textos del libro también fueron escritos por Inteligencia Artificial, una que hay que entrenar proporcionándole todo el material, que en este caso, fueron artículos periodísticos sobre cómo en Veles fabricaban las noticias falsas publicados por medios. Así fue como la IA creó su propio texto, a partir de estas publicaciones con las que la entrené y alimenté.
Este experimento también mostró que las personas no verifican
Sí, totalmente. Estamos tan acostumbrados a ver imágenes y a toda velocidad, todo el tiempo estamos deslizando por la pantalla, viendo nuestras computadoras… es un mar de imágenes y casi nunca nos detenemos. La forma en la que ahora consumimos los medios hizo fácil que me saliera con la mía, porque vemos las cosas sin detenimiento.
Unos podrán decir que pues no preguntaron nada porque lo vieron en World Press Photo y fue realizado por una fuente confiable, eso también es parte de la dinámica de ahora. ¿Cómo nos educamos para consumir los medios de comunicación de forma más inteligente y responsable? Esa sería la pregunta que deberíamos plantearnos ahora que nuestro sistema de noticias está lleno de desinformación e irá aumentando. Ahora el contexto es más importante que nunca, antes no lo era, pero ahora ya es importante que las imágenes vengan acompañadas con contexto, incluso señalando si se editó.
¿Cuáles son tus conclusiones luego de la realización de este proyecto?
Siempre me he considerado un optimista, pero ante este panorama me cuesta trabajo, porque no sólo es un problema en el fotoperiodismo, sino es un problema para la democracia, nuestra sociedad y la confianza. Así que mi conclusión es que la tecnología realmente está superando nuestras predicciones y expectativas.
El problema es más grave de lo que creí, la sofisticación de la inteligencia artificial se desarrolla con mayor velocidad de la que creemos y creo que el tiempo en el que hice Book of Veles fue la última ventana de oportunidad que tuve para hacer un proyecto así, porque la tecnología avanza tan rápido que estoy seguro que cualquiera ya podrá hacerlo y desde su teléfono celular. Ahora tendremos que lidiar en un mundo con estas herramientas. Este es un problema que se tendría que analizar y trabajar desde varios ángulos, los medios, los desarrolladores, las compañías… pero ahora ya es como un virus crónico, como el coronavirus, sólo seguirá mutando y ahora tendremos que aprender a lidiar con él por el resto de nuestras vidas. Como periodistas, tenemos la responsabilidad de lidiar con el virus. La arena más importante para combatir este virus será la educación.