16 de Noviembre de 2024

Revelaciones 03/03/2014

Las secuelas del crimen

 

Margarito Escudero Luis

Hay temas que tardan mucho en concluir, que a pesar de los esfuerzos que se hacen para que el olvido llegue pronto, sólo sirven para atizar el fuego y permitir que el tema sea más actual.

Las secuelas que dejó el caso del reportero Gregorio Jiménez no cesan, continúan apareciendo, en medio de amenazas, de más dudas sobre la efectividad de las autoridades, de cuestionamientos hacia sus métodos.

 

Aquellos que resultaron salpicados por el caso del reportero asesinado, que se vieron exhibidos, sólo esperan el momento adecuado para tomar venganza, para cobrar la afrenta, para hacer valer su poder y demostrar que contra ellos, no se puede.

Pero esa actitud, lo único que logra, es que los rencores se agudicen, que en lugar de olvido o de archivo para el tema, sólo va acomodando a cada quien en su lugar.

Lo que aquí dejó de escribirse, de investigarse, de mencionarse, el diario nacional La Jornada lo retoma como una secuela importante del asesinato de un reportero.

Da la impresión de que, en lugar de buscar culpables, responsables o cómplices, se dirigió el operativo a buscar quien pagara los platos rotos.

Arranca el extenso artículo de La Jornada que la investigación del asesinato del reportero Gregorio Jiménez de la Cruz ha revelado una serie de irregularidades en la forma en la que se desempeña la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE); levantones y desapariciones forzadas forman parte del procedimiento de averiguación de la Agencia Veracruzana de Investigaciones (AVI).

Consigna que en Las Choapas, lugar donde fue hallado el cuerpo del comunicador, al menos seis personas fueron “desaparecidas” en medio de los operativos y sus familiares exigen que si cometieron algún delito que se les juzgue pero que aparezcan vivos.

LOS DESAPARECIDOS

Es una secuela del crimen del reportero, justo en un municipio donde este año se celebrarán elecciones extraordinarias, donde el caso de Goyo debió quedar resuelto, aún no hay calma en la población, que está temerosa por los levantones y desapariciones de ciudadanos

Sin importar el daño que causaron, los presuntos agentes de la AVI “desaparecieron” a Beatriz Morales Hernández de 14 años de edad; Luis Antonio Méndez Jiménez, de 27 años de edad; Juan Carlos García Rodríguez de 26 años; Ana Luisa Morales Gómez, de 15 años; Gilberto Hernández Ramos, de 45 años; Andrés Leyva Ordoñez de 26 años.

Los familiares de estas personas ya se reunieron con autoridades estatales y les han negado que hayan sido policías quienes realizaron esos “levantones”. Entonces, ¿si no fueron ellos, quiénes?

Mucha chamba deben tener las autoridades para esclarecer este embrollo. Hay seis ciudadanos desaparecidos, algunos justo el día en que se encontró el cuerpo de Gregorio Jiménez, otros unos días después, pero todos bajo el mismo problema que les llevaron los asesinos a Las Choapas, cuando el delito comenzó en Coatzacoalcos.

REPRESALIAS

Las airadas protestas de los comunicadores, que tomaron las calles para exigir que apareciera Goyo con vida, tendrán consecuencias negativas para algunos, sólo se espera el momento adecuado, que se enfríe un poco el tema, que se calmen las aguas.

Pero está el caso de una reportera de Radio Hit, donde trabaja como jefa una comisionada de la Comisión Especial para la Atención de Periodistas (CEAP).

La corresponsal en Minatitlán de esta emisora, fue despedida de su trabajo, le argumentaron “problemas financieros”, pero se debe tomar en cuenta que esta periodista despedida, a pesar de estar en Minatitlán, asistió a viarias de las marchas que se realizaron en Coatzacoalcos, es simpatizante de la petición de que desaparezca la CEAP.

Así que tocó una fibra muy delicada, pues su jefa cobra una jugosa cantidad en esa comisión, con lo que puede pagar los abonos de su flamante camioneta.

Así que el despido por “razones financieras” puede tener algo de jiribilla