19 de Noviembre de 2024

Sobredosis de Café

Ricardo Jiménez Santander

 

Medallas agotadas

 

Para muchos han pasado desapercibidos los Juegos Olímpicos, como si no existieran; para otros, que sí saben que ahorita están en curso, critican la participación de México y todo alrededor de quienes lo representan.

Esta celebración al parecer nació con mal fario. El país organizador se encuentra inmerso en la mayor crisis política de su historia. La presidenta de izquierda, Dilma Roussef, está en un proceso de “impeachment” o imputación, en la cual es acusada por violar las normas fiscales, maquillando el déficit presupuestal (BBC, 2016). Asimismo existe la problemática del zika, las protestas sociales por la alta inversión en los juegos deportivos y un presupuesto insuficiente para terminar la obras y realizar el espectáculo. Todo lo expuesto es problema de los que organizan los Juegos Olímpicos y de los brasileños; los mexicanos tenemos también los nuestros.

Para México, los juegos han sacado a flote la mala organización de sus instituciones y una crisis deportiva. Sin embargo, nuestro país cuenta con la más alta inversión en el deporte en toda Latinoamérica, 2 mil 800 millones de pesos; aunque la mayor parte se va para infraestructura, en los deportes de mayor aceptación (basquetbol, futbol y voleibol) y en becas deportivas.

El foco de atención para los mexicanos, con respecto a los Olímpicos, han sido cosas extra deportivas. Aquí algunas de las cuales han sido las principales notas al momento:

  1. El viaje del titular de la Conade (Alfredo Castillo) con su novia, empleando ella el uniforme y acreditación de la delegación mexicana. Por cierto, el uniforme es Hugo Boss.
  2. El supuesto sobrepeso de la gimnasta mexicana Alexa Moreno, a pesar de ser la gimnasta mexicana con mejores lugares en la historia. Como si todos los mexicanos fuéramos muy delgados.
  3. La eliminación del equipo de futbol, en un país donde cada día hay más naturalizados y extranjeros en la liga local.
  4. La participación del halterista con parches en el uniforme, Bredni Roque, debido a que no fue entregado a tiempo. Por cierto, este deportista es nacido en Cuba, pero representa a nuestro país, en un deporte en donde Soraya Jiménez ganara medalla de oro.
  5. La justificación de la NO medalla de Paola Espinosa y Alejandra Orozco, al criticar que fueron victimas de los jueces, por la represalia de no pagar una multa por no haber hecho el Mundial de natación (Animal Político, 2016).

 

El encargado del deporte en México es un mexiquense (creo que ahí se explica todo) que ha pasado de Procurador de Justicia en el EdoMex (llevó el caso Paulete), comisionado de Michoacán para la pacificación (si bien bajaron los delitos, incrementaron los secuestros y violaciones a los derechos humanos y crecieron las autodefensas), Profeco (sin pena ni gloria) y ahora la Conade (tiene acumulados 50 millones de dólares en multas con las federaciones mundiales de natación y basquetbol). Ha recibido el mote del “Midas al revés”.

Los méritos en materia deportiva del titular de la Conade se remontan a ganar a un primer lugar en el Torneo Abierto de pádel de raqueta en Bosques las Lomas, para el presidente fueron méritos suficientes.

La problemática de la falta de resultados se puede resumir en dos cuestiones puntuales.

  1. El dinero que se invierte en la Conade proviene de nuestros impuestos, y que los tiren, no es agradable.
  2. Si seguimos con la tendencia de no obtener medallas, faltarán deportistas que inspiren a nuevos deportistas. En un país, en donde es más inspirador ver novelas como “El señor de los cielos” o “Las muñecas de la mafia”, que es lo que está inspirando a los jóvenes.

Parece que a Castillo lo esperan una serie de cuestionamientos relacionados con la actuación mexicana. Algunos medios piden su cabeza, y los diputados lo esperan para su comparecencia. Necesitará buenas explicaciones de por qué las medallas han quedado agotadas.