LA LLEGADA de Raúl Madrazo Lemarroy a la Secretaría Municipal de Desarrollo Económico tiene varias lecturas en el ámbito político que se presenta previo a la próxima administración estatal.
Madrazo Lemarroy, no solo es el yerno del ex diputado local Rafael García Bringas, sino también es sobrino del ex alcalde Rogelio Lemarroy González, quizá el hombre de mayor confianza en Coatzacoalcos del gobernador electo, Miguel Ángel Yunes Linares.
Su llegada a la titularidad de la Secretaría de Desarrollo Económico no se descarta sea un fogue express para lo que le viene apenas inicie la nueva administración, ya que los politólogos de café lo están candidateando para la dirección de la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento.
LA PREGUNTA del millón de dólares es ¿cuáles fueron las palabras mágicas que les dijo la nueva titular de Sefiplan a los alcaldes panistas y perredistas que enseguida entregaron hasta brillando de limpio el Palacio de Gobierno?
Incluso el líder de los alcaldes que mantenían tomado el Palacio, Miguel Ángel Yunes Márquez, externó su confianza en Clementina Guerrero García, a quien le dio el beneficio de la duda para que les pague a los ayuntamientos en la medida de las posibilidades del Gobierno estatal.
Yunes Márquez todavía dijo que por tratarse de una deuda institucional, si el gobierno de Flavino Ríos no alcanza a sufragarla, en algún momento tendrá que hacerlo el gobierno entrante, el de Miguel Ángel Yunes Linares. Muy bien por Clementina Guerrero, tiene el grandioso poder de la persuasión.
TIENE mucha lógica que el alcalde de Coatzacoalcos, Joaquín Caballero Rosiñol, exija que la Federación le condone los impuestos ante el IMSS y de paso los pagos de la Comisión Federal de Electricidad, considerando que la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) de Veracruz le adeuda al municipio 207 millones de pesos.
Por lo menos, de los 15 millones de pesos que le depositó la Sefiplan al Ayuntamiento durante la semana pasada, alcanzará para cubrir la nómina correspondiente a este 15 de noviembre.
LA DENUNCIA que ayer formuló el Ayuntamiento de Coatzacoalcos ante la Procuraduría General de la República y en contra del Gobierno del Estado por la retención de recursos, se suma a la que recientemente se hizo ante la Suprema Corte Nacional de Justicia. A ver si el Poder Judicial logra sensibilizarse ante las demandas de los municipios veracruzanos.
LO QUE LE FALTABA al estado de Veracruz era que la empresa Calificadora Fitch & Ratings lo reportara a la baja en la nueva calificación crediticia, debido a su falta de liquidez y aumento al pasivo circulante por un monto de 46 mil 398 millones de pesos.
Lo anterior en pocas palabras significa que Veracruz se convierte en un sujeto riesgoso para la inversión, por lo que esto aumentaría tasas de interés y requisitos en caso de solicitar un nuevo crédito. Así se pone el panorama de nuestro estado para los próximos años.
