Margarito Escudero Luis
Este ha sido un año difícil para los periodistas, aunque muchos hayan olvidado los agravios recibidos y los muertos que el gremio ha aportado en esta azarosa época que nos ha tocado vivir.
La celebración debe ser un reproche a las autoridades que se esforzaron en desviar los motivos que llevaron al crimen de los compañeros, a crear confusión y a incrementar la desconfianza en las instancias de impartición de justicia.
Pero, a pesar de la verdad oficial, la percepción popular marca la diferencia, la verdad no puede quedar oculta, aunque los culpables sigan libres o en proceso de alcanzar su libertad.
Si los festejos nublan la visibilidad de nuestra realidad, estaremos en condiciones de ser humillados nuevamente.
AGRONITROGENADOS
Este viernes se puso en marcha la rehabilitación de la planta de Agronitrogenados, llamada ahora Fertilizantes Nitrogenados y el pretexto es buscar la autosuficiencia alimentaria, como se dijo en la ceremonia.
Ahí estuvieron los secretarios de Agricultura Enrique Martínez y Martínez, el secretario de energía, Pedro Joaquín Coldwell y el director general de Pemex, Emilio Lozoya Austin.
Llegaron tarde, pero finalmente se llevó a cabo el protocolo y los trabajos para rehabilitar esa planta simbólicamente dieron inicio, ponderando que el precio de gas natural es competitivo, pero se comprará a Estados Unidos y luego se buscarán vías de comercialización con el apoyo de otras empresas y los tres niveles de gobierno.
Se espera que para 2015 se logre una producción de 990 mil toneladas de Urea y 270 mil toneladas de Nitrato de Amonio en esas instalaciones pero, como lo dijo Edgar Torres Garrido, Asesor de la Dirección General de Pemex, eso no será suficiente para lograr el objetivo de alcanzar la autosuficiencia alimentaria, si no se suman otros esfuerzos, como acercar a los productores la capacitación, seguros y otros elementos necesarios para garantizar la producción.
Así suena muy bien el proyecto, todos esperamos verlo convertido en realidad en el corto plazo, para que el campo se reactive.
Se trata pues, por lo menos en la palabra, un acercamiento de Pemex a los productores del campo, es probable que se la primera vez que esto ocurre, por lo menso en el papel, justo cuando la aún paraestatal enfrenta problemas con los campesino de la sierra, quienes tomaron la Bocatoma, presa de donde se surte de agua al Complejo de Cosoleacaque y a la Refinería Lázaro Cárdenas.
Y es que muchos ofrecimientos de los petroleros no se cumplieron además que los habitantes de Pajapan y otras localidades, ponen de manifiesto que Pemex hace grandes negocios aprovechando el agua que se genera en sus tierras y los beneficios no llegan a sus habitantes.
Porque, para que el fertilizante que se producirá en esta planta recién adquirida por Pemex, los campesinos requieren tener el recurso suficiente para poder comprarlo y, si no hay billete, pues Pemex, a través de PMI, buscará otros mercados, como quedó de manifiesto en la ceremonia.
VIEJAS PRÁCTICAS
Luego del acto protocolario en Fertilizantes nitrogenados, la comitiva fue a la Terminal Marítima de pajaritos, ahí se abanderaron dos buques y se puso en marcha lo que se llama “Corredor Transístmico” de Pemex, que consiste en una serie de tuberías que traviesan el Istmo de Tehuantepec cuya función es llevar combustibles de un extremo a otro.
Así habrá un ahorro sustancia de tiempo y dinero para mover grande cantidades, sin tener que dar un rodeo hasta el Canal de Panamá.
Además de todos los personajes mencionados, al acto de la Terminal Marítima llegó Carlos Romero Deschamps, a quien el director de Pemex llamó “mi amigo” y los trabajadores petrolero ahí presentes, debidamente dirigidos, se aventaban una porra tradicional, cada vez que se mencionaba el nombre de su dirigente.
Pemex se moderniza, entra a la privatización, recupera plantas, dice que va por la autosuficiencia alimentaria, busca el futuro, mientras que se aplican las mismas técnicas para ensalzar a una persona y continuar con el culto a la personalidad.
Ni modo, al parecer siguen dando resultados.
