Alito da contratos del PRI a empresas de amigos
MARIO MALDONADO
El presidente del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, no solo acumula escándalos por sus lujos, excesos y un presunto enriquecimiento ilícito como gobernador de Campeche; por su lenguaje soez y sus ataques a periodistas, empresarios y políticos; Alito, como lo conocen sus amigos y detractores, también arrastra una serie de escándalos por dilapidar el dinero del partido en contratos otorgados a empresas de amigos y conocidos, la mayoría de estas fachada.
En esta columna revelamos por primera vez —antes que la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, lo exhibiera de cuerpo entero en grabaciones privadas y luego la mandaran a callar— las millonarias operaciones inmobiliarias que Alito concretó como gobernador. A partir de esta entrega daremos cuenta de diversos contratos irregulares que en los últimos tres años ha otorgado con las prerrogativas del PRI.
A través de empresas fachada, Alito entregó a colaboradores cercanos y aliados políticos por lo menos una tercera parte de los 570 millones de pesos que desde septiembre de 2019 tuvo el PRI para contrataciones totales, es decir, uno de cada tres pesos que adjudicó este partido a proveedores corresponden a presuntos actos de corrupción.
Se identifican cinco grupos de compañías a las que Alito Moreno dirigió los contratos. Son empresas de Campeche cuyos propietarios son cercanos al político; también algunas vinculadas al Partido Verde Ecologista; firmas registradas en Tabasco; otras de Oaxaca y otras más vinculadas a una red de contratistas del Senado.
Para el primer caso, el de las compañías campechanas, se tiene contabilizado un monto en contratos de 89 millones de pesos para la adquisición de servicios de asesoría en materia política, legal, administrativa y financiera, para la instrumentación de estrategias de comunicación digital y para servicios de alimentación en eventos del organismo político.
Entre estas hay dos extraños contratos por un monto acumulado de 51 millones de pesos, con la razón social Integra Estrategias Globales SC. El principal socio del despacho, constituido en agosto de 2022, es Miguel Ángel Sulub Caamal, expresidente del Comité Directivo Estatal del PRI en Campeche y exsecretario de Desarrollo Social y Regional del gobierno estatal.
La misma firma es dirigida por María Luisa Sahagún Arcila, exsecretaria de Administración e Innovación Gubernamental del gobierno de Campeche, quien se encargó de operar en el PRI en febrero de 2020 y en el mismo mes de 2021 los dos millonarios contratos correspondientes a cursos de “capacitación, promoción y desarrollo del liderazgo político de las mujeres”.
Integra Estrategias Globales comparte dirección física con SeFe Publicidad, SA de CV, compañía que recibió en enero y octubre de 2021 dos contratos del CEN del PRI por alrededor de 7.4 millones de pesos por el concepto de “realización de laboratorio de respuesta rápida, así como estrategias digitales y cualquier tipo de publicidad digital”.
La empresa de publicidad se constituyó en septiembre de 2019, justo el momento en que Alejandro Moreno asumía la dirigencia del CEN del PRI; sus accionistas son Sebastián Maya Romero y Federico Aranda Barrera, jóvenes de 26 y 31 años, respectivamente, quienes enlistaron en los padrones de proveedores un domicilio en el municipio de Corregidora, Querétaro, con uso de suelo habitacional.
También se suman Servicios Administrativos Fugith S de RL de CV, contratada por el CEN del PRI en marzo de 2022 para otorgar servicios de consultoría por más de 30 millones. La compañía fue constituida en diciembre de 2019 y su representante legal es Kelly Maribi Estrella García, testigo de contratos de la firma Integra Estrategias Globales y habitante también del estado de Campeche.
Entre las empresas campechanas beneficiadas también destaca Gastrosureste Alimentos SA de CV, de Carmen María Cabañas Ortiz y su hija, Susana Guadalupe Hernández Cabañas, propietarias de La Pigua de Campeche, el restaurante favorito de Alito.
