3 de Diciembre de 2024

MUNDO DIGITAL / El nuevo papel de la oficina en México / ARMANDO KASSIAN

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El año 2020 marcó un antes y después en la forma en que trabajamos. La pandemia del COVID-19 nos obligó a adaptarnos rápidamente a nuevas formas de realizar nuestras tareas laborales, y una de las más destacadas fue el home office o trabajo desde casa. En México, como en el mundo, las empresas tuvieron que implementar esta modalidad para mantener sus operaciones y asegurar la salud de sus empleados.

Regreso a la Oficina: un cambio de paradigma. A medida que la situación sanitaria mejora, surge la pregunta: ¿qué pasará con el home office en México? Algunas empresas están considerando el retorno a la oficina de forma parcial o total, otras están optando por mantener el trabajo remoto como una opción permanente. Esta decisión tiene implicaciones significativas, para empleados y empresas.

Resistencia al retorno. Un estudio reciente reveló que 80 por ciento de empleadores se arrepienten de haber implementado políticas de retorno a la oficina de manera prematura. Compañías como Meta y Zoom han impuesto días obligatorios de presencia, lo cual ha generado resistencia y protestas por parte de los empleados. Muchos de ellos consideran que el trabajo en un edificio de oficinas durante ocho horas al día es obsoleto, especialmente después de haber experimentado las ventajas del trabajo distribuido.

La cultura de trabajo obsoleta. El retorno a la oficina plantea desafíos para empleados y empresas. Muchas compañías argumentan que la presencia física es necesaria para fomentar cultura corporativa, cohesión del equipo e innovación. Pero, esto refleja una mentalidad obsoleta basada en el presentismo y desconfianza a empleados.

Impacto medioambiental y calidad de vida. Además, el retorno a la oficina plantea preocupaciones medioambientales. El desplazamiento diario al trabajo genera emisiones de carbono. Los empleados que han experimentado la comodidad y la flexibilidad del trabajo desde casa valoran la calidad de vida que esta modalidad les brinda, evitando el estrés de los desplazamientos diarios.

El futuro de la oficina: adaptación y cambio. A medida que avanzamos hacia un futuro post-pandemia es necesario repensar el papel de la oficina en México. En lugar de ser sólo un lugar donde los empleados realizan sus tareas individuales, la oficina debe transformarse en un espacio diseñado para socialización e interacción.

Rediseñando el Espacio de Trabajo. Las empresas deben considerar la implementación de un enfoque más flexible en el diseño de sus oficinas. En lugar de asignar puestos de trabajo fijos, se puede crear un entorno similar a una cafetería, donde los empleados pueden interactuar de manera más efectiva. Esto implica crear espacios comunes y salas de reuniones equipadas para telepresencia.

El impacto en la cultura corporativa. El cambio hacia un enfoque más flexible en el trabajo también tiene implicaciones en cultura corporativa. Las empresas que se resisten a adaptarse a esta nueva realidad corren el riesgo de volverse poco atractivas para el talento. Por otro lado, aquellas que comprenden el cambio y se adaptan a él tienen más posibilidades de atraer y retener talento.

El desafío de la arquitectura y diseño. La transformación de la oficina no es sólo un desafío cultural, sino también arquitectónico y de diseño. Las empresas deben invertir en espacios que promuevan colaboración e interacción, alejándose de la idea tradicional de cubículos. Esta transformación requiere una visión innovadora.

Conclusiones. El home office llegó para quedarse en México. La pandemia nos demostró que es posible trabajar de forma efectiva y productiva desde casa. Sin embargo, el futuro de la oficina no implica su desaparición, sino su transformación. Las empresas que comprendan este cambio tendrán más posibilidades de atraer y retener talento y fomentar una cultura de confianza y flexibilidad.

En resumen, el home office ha cambiado nuestra forma de trabajar en México. La oficina debe evolucionar para convertirse en un espacio que fomente interacción, en lugar de ser simplemente un lugar donde los empleados realizan tareas individuales. La adaptación y el cambio son esenciales para construir un futuro laboral más flexible y satisfactorio.

POR ARMANDO KASSIAN