Agencias
Esto
12 meses exactos han transcurrido desde que Robert Dante Siboldi fue presentado como timonel de Cruz Azul en las instalaciones de la Noria. El 6 de septiembre del 2019, entre un sinfín de críticas, hostilidades de la afición cementera y un mar de cuestionamientos por la forma en que llegó al banquillo tras la destitución de su antecesor Pedro Caixinha y la renuncia de Ricardo Peláez como director deportivo de la institución, fue como el uruguayo inició su gestión al frente de los capitalinos.
Lo que empezó con más dudas que certezas, hoy es una realidad muy distinta, con La Máquina en lo más alto del Guard1anes 2020 y como candidata al título de Liga, por encima de otros equipos en gran momento.
«Es un honor y orgullo para mí regresar a casa. Tenemos como objetivo obtener buenos resultados, pero nuestra misión es crear una forma de juego, que la afición esté contenta», fueron sus primeras palabras y hasta el momento no ha defraudado.
El primer partido que Siboldi dirigió fue en la jornada 9 del Apertura 2019 con un empate 0-0 ante los desaparecidos Tiburones Rojos de Veracruz. Ese resultado no gustó, y los dimes y diretes comenzaron, pero Robert Dante poco a poco los apagó.
Desde entonces, han sido más alegrías que tristezas con una racha positiva que llegó a 13 partidos oficiales sin perder, un saldo perfecto de tres triunfos en el Clásico Joven sobre las Águilas del América y, además, dos trofeos más en las vitrinas: la Leagues Cup, donde vencieron a Tigres y el torneo de pretemporada Copa por México, donde alzaron el trofeo tras vencer a las Chivas de Guadalajara.
«La mayor satisfacción es estar al frente de estos jugadores que tienen el deseo de triunfar, conjuntar un equipo y plasmar una idea de juego después de cada partido, haber cambiado el mal inicio y tener una regularidad. Los jugadores van creciendo, son un equipo humilde, comprometido y son detalles que harán llegar a donde queremos que es la novena estrella», apuntó hace algunos días.
Perdimos un partido simplemente: Siboldi
El charrúa se lo ganó a pulso y renovó contrato con Cruz Azul hasta el Clausura 2021. El objetivo principal continúa pendiente, el título de Liga sigue como prioridad, pero Siboldi y sus pupilos han dado fuertes indicios de que este año puede ser el bueno.
