Para ganar su histórico 1-2 de este 2023, Red Bull tuvo que juntar a Checo Pérez y Max Verstappen como ingredientes principales, en una receta que Ricciardo ahora nos revela
Agencias
México
Ganar los títulos mundiales tanto de pilotos como de constructores se oye fácil, pero la verdad es que no son quesadillas y para ellos Red Bull tuvo que echar mano de ingredientes muy especiales como Checo Pérez y Max Verstappen, además de una receta secreta que el australiano Daniel Ricciardo finalmente nos revela para cocinar ese histórico 1-2 de la escudería austriaca y el tricampeonato del neerlandés.
Si bien dicen que para hacer cualquier pastel siempre se necesitan romper algunos huevos para su receta secreta, este no fue el caso pues Checo Pérez, a pesar de todas las especulaciones, pudo mantener su asiento con Red Bull incluso para 2024, mientras Verstappen aprovechó al máximo el apoyo del tapatío y Ricciardo se quedó con las ganas de su cachito… y también de su volante.
Daniel Ricciardo se montó al RB19 y esto fue lo que sintió
Luego de que el RB19 tanto de Checo Pérez como de Verstappen solo cedió ante el Ferrari de Carlos Sainz en Singapur este 2023, Daniel Ricciardo tuvo la oportunidad de probarlo en su regreso a Alpha Tauri en Hungría, a donde se presentó como reemplazo del despedido Nyck de Vries y reveló la receta secreta para el triunfo de Red Bull.
“Sí, simplemente me encantó. Me divertí y fue bueno hacerlo de nuevo. Esperaba que la convocatoria fuera para la semana siguiente en Budapest, durante las vacaciones de verano, pero una vez que me lo dijeron y por cómo me sentí después de la prueba pensé: ‘Hombre, estoy listo, hagámoslo’”, afirmó el piloto australiano de 34 años para el podcast oficial de la F1: Beyond The Grid.
La receta especial de Red Bull para ganar en 2023
Sobre lo que hace imbatible al RB19, Daniel Ricciardo fue claro en señalar que “sí, los coches han evolucionado y cambiado mucho, pero había parte de su ADN que seguía siendo lo que recordaba (estuvo en Red Bull desde 2014 a 2018) y lo que realmente me gustaba en un coche de carreras. La parte que más me gustó es que pude conducirlo como quiero. Eso no explica realmente lo bueno del coche, pero explica por qué lo amo”.
Y culminó: “Solo recuerdo haber pisado el acelerador. Una vez que llegué al 50 por ciento, tuve mucha fe en pisar ese último 50 por ciento y no tener que preocuparme realmente por el coche o dónde estaba. Un coche rápido no siempre es el coche más fácil de conducir. Por más hermoso e impresionante que sea el coche, aun así tienes que conducirlo. Miro la temporada que tuvo Max y también ganó carreras en condiciones mixtas, en mojado, y el auto es increíble, pero no lo hace todo por ti”.
Información tomada del Heraldo de México