Con gol agónico de Marco Fabián, el Rebaño Sagrado derrotó por la mínima a los Esmeraldas, y es el líder del Clausura 2015.
GUADALAJARA, Jal., abril 12 (EL UNIVERSAL)
A veces hay que esperar hasta el final para que el desenlace de la historia sea de ensueño. El remate por parte de Marco Fabián, de primera intención, al 87’, sabe a triple gloria: decreta la victoria de Chivas 1-0 sobre León, pone al equipo a un punto de la salvación matemática y le entrega al Rebaño el liderato del torneo.
Guadalajara se para en la cancha del estadio Omnilife con la consigna de ganar para convertirse en líder del Clausura 2015. La combinación de resultados le permite soñar. Pero su futbol, no tanto. Los primeros minutos son complicados. A pesar de que tiene la pelota, sus llegadas tienen poca dosis de peligro: un disparo lejano de Miguel Ponce, a las manos de Yarbrough (4’) y un tiro libre de Raúl López, también controlado por el arquero (14’).
Pero León, que ha sufrido amnesia futbolística toda la temporada, recuerda súbitamente que hace no mucho tiempo celebraba un bicampeonato y que su juego deslumbraba al país. Si alguna vez lo hizo, ¿por qué no repetirlo? Entonces se “enganchan” sus figuras. Carlos Peña, Luis Montes y José Juan Vázquez vuelven a funcionar como un tridente temible.
Primero, Ignacio González remata de chilena dentro del área, tras una serie de rebotes, que se va por un costado (22’). Un minuto más tarde, el Gullit Peña conecta un cabezazo que supera a Michel, mas estremece el travesaño.
Son los peores momentos para el Rebaño. En el único respiro que tiene durante la primera parte, Carlos Fierro controla en el área y dispara. Edwin Hernández se barre y corta con la mano. Pero el silbante asegura que no existe intención, por lo que la acción continúa, al 30’.
Al arranque del complemento, otra vez Gullit Peña con un pase al hueco para Miguel Sabah, que le gana a Michel y cae al césped. El silbante Paul Delgadillo asegura que se trata de un “clavado” y amonesta al delantero. Chivas se salva.
El técnico José Manuel de la Torre sabe que el liderato está al alcance de la mano. Ordena cambios. Se atreve a soltar al equipo. Así, Marco Fabián cimbra el travesaño, al 75’, con un tiro desde el borde del área que deja ahogado el grito de gol en más de 40 mil gargantas.
El silbatazo se acerca. Desde la derecha, Raúl López manda pelotazo pasado. Jonny Magallón intenta despejar. Su ejecución es mala. Deja la redonda cerca del manchón penal. Marco Fabián se encuentra el esférico. Ni lo piensa. Conecta con parte externa. Remate pegado al poste. Imposible para Yarbrough. Las redes se estremecen. La tribuna explota. Éxtasis de dos tonos: rojo y blanco.
Gol, al 87’, que sabe a gloria. Que pone al equipo a un punto de la salvación y que coloca a Chivas como líder general.