Luego de que se le anularon dos goles legítimos, el Tricolor tiene la capacidad para derrotar 1-0 los africanos
CIUDAD DE MÉXICO
La selección de México superó las trabas que le pusieron el árbitro Wilmer Roldán y su asistente Humberto Clavijo para vencer 1-0 aCamerún en su debut mundialista en Brasil en el Estadio das Dunas.
El silbante colombiano anuló dos goles legítimos a Giovani dos Santos.
El único gol del encuentro fue obra de Oribe Peralta.
Con este marcador, México consigue tres puntos valiosos y se coloca como segundo lugar del Grupo A y se verá las caras con el cuadro anfitrión el martes; mientras, los africanos se quedaron sin puntos y jugarán contra Croacia un día después.
La escuadra “verde” saltó a la cancha convencida de que el triunfo era lo único que les servía y desde que el balón rodó lo buscaron en base a un futbol bien armado, de acompañamiento, sobre un cuadro africano que ofreció un desempeño pobre en todos los aspectos.
El mejor funcionamiento del “Tri” se vio reflejado en la cancha al minuto 11, en un balón por derecha al área, donde Giovani dos Santos, de volea, no perdonó; sin embargo, el asistente Clavijo “se sacó de la manga” un fuera de lugar inexistente, para acallar el grito de gol.
Lo poco que ofreció Camerún se dio por la banda de la izquierda, en un gran desborde de Assou Ekotto, quien se llevó la marca de Paul Aguilar y Francisco Javier Rodríguez, para enviar un centro que Samuel Eto´o remató al poste.
Previo a un nuevo error arbitral, el juez central le perdonó un penal a Héctor Moreno, quien empujó a Eric Choupo. Sin embargo, Clavijo se la cobró a México al señalar otro fuera de lugar inexistente en un tiro de esquina, cuando Gio ya había rematado al fondo de las redes, para irse así al descanso.
En arranque del complemento, “Gio” habilitó perfecto a Oribe Peralta, quien se paró frente al portero, sin embargo, no supo definir y estrelló su remate en el guardameta. La respuesta rival llegó en un tiro libre que Ekotto cobró y que fue desviado por la barrera para irse “besando” el poste derecho.
Fue hasta el minuto 60 cuando México pudo registrar en la pizarra su mejor futbol sin que el arbitraje interviniera, en una gran jugada de Héctor Herrera, quien filtró para Giovani que sacó un disparo raso que el portero tapó, pero el rebote le quedó a Oribe y éste solo la tuvo que empujar para hacer estallar el estadio.
El técnico Miguel Herrera hizo cambios, sacó a un cansado Andrés Guardado para poner en su lugar a Marco Fabián, así como a Peralta para darle cabida a Javier Hernández y así refrescar el ataque.
La recta final fue de un acoso importante de los comandados por Eto´o y cerca estuvieron del empate en un cabezazo franco de Benjamin Moukandjo que hizo volar a Guillermo Ochoa, hacia su derecha, para tomar con las dos manos el esférico y ahí firmar un triunfo merecido, que debió haber sido por una mayor diferencia.